Autor Blog Mutuactivos

Por Mutuactivos

  • 16 marzo, 2020
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    Por Mutuactivos

    • 16 marzo, 2020

    Los temores sobre el impacto que la epidemia de coronavirus puede tener en la economía global han derivado en una situación de pánico en los mercados.  Las bolsas han caído un 30% desde los máximos de febrero y la renta fija privada ha sufrido un fuerte castigo.

    El mercado está poniendo en duda la capacidad de los bancos centrales para sostener la economía. Tanto la FED como el BCE han comprometido grandes masas de liquidez con el objetivo de que las empresas se puedan financiar, pero sus medidas fueron acogidas con escepticismo, provocando una aceleración de las caídas. 

    La excesiva complacencia de los inversores tras un largo periodo alcista, en gran parte consecuencia de una política monetaria que ha favorecido la especulación, puede ser también parte de la explicación. Esta caída ya es comparable con las vividas tras la quiebra de LTCM en 1998, la burbuja tecnológica en el año 2000, la Gran Recesión de 2008 o la crisis del euro de 2011. En todos estos casos, pasado un tiempo, las bolsas volvieron a recuperar la tendencia y marcaron nuevos máximos, porque a largo plazo el mundo siempre crece y el tejido empresarial y su reflejo en los mercados también.

    Evolución del impacto del covid19 en mercados- Blog MutuactivosLas bolsas han caído un 30% desde enero, por lo que preferimos mantener liquidez.

    En nuestra opinión, los precios actuales ya descuentan la probabilidad de una recesión. Por ello, tenemos intención de mantener las posiciones actuales, cerca de la neutralidad, evitando la exposición a compañías cíclicas muy apalancadas desde el punto de vista financiero. Dicho esto, nuestra prioridad ahora mismo es mantener altos niveles de liquidez en las carteras para poder hacer frente a posibles reembolsos, si se llegasen a producir.  

    Creemos que esta crisis pasará y la situación volverá paulatinamente a la normalidad.  La volatilidad debería ir bajando a medida que los mercados alcanzan un nuevo nivel de equilibrio y, seguramente, los inversores que tengan un horizonte temporal de largo plazo verán recompensada su paciencia.  

Los temores sobre el impacto que la epidemia de coronavirus puede tener en la economía global han derivado en una situación de pánico en los mercados.  Las bolsas han caído un 30% desde los máximos de febrero y la renta fija privada ha sufrido un fuerte castigo.

El mercado está poniendo en duda la capacidad de los bancos centrales para sostener la economía. Tanto la FED como el BCE han comprometido grandes masas de liquidez con el objetivo de que las empresas se puedan financiar, pero sus medidas fueron acogidas con escepticismo, provocando una aceleración de las caídas. 

La excesiva complacencia de los inversores tras un largo periodo alcista, en gran parte consecuencia de una política monetaria que ha favorecido la especulación, puede ser también parte de la explicación. Esta caída ya es comparable con las vividas tras la quiebra de LTCM en 1998, la burbuja tecnológica en el año 2000, la Gran Recesión de 2008 o la crisis del euro de 2011. En todos estos casos, pasado un tiempo, las bolsas volvieron a recuperar la tendencia y marcaron nuevos máximos, porque a largo plazo el mundo siempre crece y el tejido empresarial y su reflejo en los mercados también.

Evolución del impacto del covid19 en mercados- Blog MutuactivosLas bolsas han caído un 30% desde enero, por lo que preferimos mantener liquidez.

En nuestra opinión, los precios actuales ya descuentan la probabilidad de una recesión. Por ello, tenemos intención de mantener las posiciones actuales, cerca de la neutralidad, evitando la exposición a compañías cíclicas muy apalancadas desde el punto de vista financiero. Dicho esto, nuestra prioridad ahora mismo es mantener altos niveles de liquidez en las carteras para poder hacer frente a posibles reembolsos, si se llegasen a producir.  

Creemos que esta crisis pasará y la situación volverá paulatinamente a la normalidad.  La volatilidad debería ir bajando a medida que los mercados alcanzan un nuevo nivel de equilibrio y, seguramente, los inversores que tengan un horizonte temporal de largo plazo verán recompensada su paciencia.